Muchas de las letras de las canciones de amor están cargadas de mensajes que nos acompañan en momentos de intenso amor y en momentos de profundo dolor por desamor. Estos mensajes son dignos de análisis; no tienen desperdicio.

En esta aparente sencilla e inofensiva canción vemos como se entendía el amor hace 70 años: El amor es algo que te viene, que te llega de fuera, que se te da.  Un día vienes tú y me quieres a mí y me das tu amor. Así de fácil. Tu me das a mi…. yo te encuentro y tu tienes que darme. Si os fijáis es él quien busca una mujer que lo ame. Él busca y busca y está preocupado por si no la encuentra. Ella, podemos inferir, que no hace nada más que esperar a que un hombre la encuentre para empezar, entonces, a dar amor. Ella entrega su amor y dedicación a él. Este es su modo de amar. Si tu me elijes yo te querré para siempre.

Me viene a la mente la imagen de un baile domingo por la tarde donde los jóvenes van a buscar pareja. Ellos mirando y buscando, ellas con sus amigas o incluso con su madre esperando a que uno la elija y la saque a bailar. Él activo, ella pasiva. Él encuentra y ella entrega.

Muchos podéis pensar que el modelo de amor del ejemplo ya no está vigente, sin embargo, hay personas que lo viven así. Yo tengo que ser objeto de amor de alguien y ese alguien me debe amor. Es una visión del amor que se orienta del tú hacia el mi. Yo me sitúo en el centro. Yo, yo, yo, mi, mi, mi…

Es un amor entendido como algo que se obtiene y se posee.

La evolución de los distintos modelos de amor nos ha conducido hasta el momento actual en el que conviven diferentes ideas sobre el amor. Este puede ser uno de los motivos de la dificultad para mantener vínculos afectivos estables y sanos.

Ah! y hoy feliz día de Sant Jordi!