Las palabras curan

BENDICIÓN DEL ÚTERO

Todas las mujeres, tengamos ciclo menstrual o ya no, con útero o sin él, tenemos este lugar mágico en el que secuecen muchas cosas, de hecho, se le compara con un cáliz o un caldero por la forma que tiene. Las medicinas energéticas le dan un tratamiento especial ya que creen que en el útero reside la capacidad para crear, sanar, saber y gozar de la mujer, por tanto su salud psíquica, física, emocional y espiritual está íntimamente ligada a este centro.


Un grupo de mujeres encabezado por Miranda Gray, autora del precioso libro «Luna Roja» comenzó a practicar una sencilla y breve meditación guiada, focalizando la atención en el útero. Su idea inicial era justamente que cada una de ellas pudiera activar su potencial energético orientando su consciencia a esta zona. Los resultados fueron tan satisfactorios para las practicantes que en poco tiempo se fue difundiendo la idea hasta darle el nombre de «Womb Blessing Attunement» que se ha traducido como «Sintonización de Bendición del Útero» aunque yo prefiero llamarle «Sintonia de Bendición del Útero».

En la actualidad más de 30.000 mujeres en todo el mundo se unen a eta sencilla práctica el mismo día (siempre en luna llena), a la misma hora y desde los cinco continentes en grupo o en solitario. El día 29 de este mes será la próxima Sintonía de Bendición. Sólo tienes que entrar en la web e inscribirte, es gratis.
El objetivo es hacer llegar esta energía tan potente a la humanidad entera rescatando los valores de lo femenino; respeto por los ciclos naturales, amor desinteresado, empatia, comprensión, fortaleza, resistencia etc. contribuyendo así a difundir el amor universal.


No es una práctica exclusiva para mujeres. La sencilla y hermosa meditación guiada «Bendición Lunar para hombres» les conecta a ellos con su propio femenino. Los hombres también necesitan sanarse y cuidarse amorosamente.


En resumen, creo que de lo que se trata en realidad con esta iniciativa  es que nos dediquemos un tiempo a meditar, centrados en nosotros mismos, escuchando y sintiendo nuestro cuerpo para respetarnos más y amarnos mejor.

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